En este clásico de los años 80, una impresionante belleza rubia americana con un cuerpo perfecto y grandes tetas naturales se pone a lo sucio en posiciones misioneras, vaqueras y hardcore. Su delicioso arbusto y sus pezones duros se suman a la experiencia erótica, lo que la convierte en una visita obligada para cualquier fanático del porno suave y celebridad.